¿Qué es un presupuesto?
Es una herramienta que te permite planificar cómo vas a manejar tus ingresos y gastos durante un periodo determinado, generalmente un año. Con un buen presupuesto, alcanzarás tus objetivos
Paso 1. Define tus objetivos
Antes de sentarte a hacer números, es crucial tener claro qué quieres lograr con tu negocio durante el período del presupuesto. Tal vez quieres aumentar tus ventas o expandir tu equipo.
Para hacerlo de forma efectiva debes de:
- Establecer metas claras y alcanzables.
- Colocar objetivos a corto, mediano y largo plazo.
Paso 2. Estima tus ingresos
Ahora que sabes lo que quieres lograr, es momento de proyectar los ingresos que esperas generar durante el año. Es importante que estas proyecciones se basen en ventas pasadas, las tendencias del mercado y tu plan de crecimiento.
¿Cómo hacerlo?
- Si ya tienes un historial de ventas, analiza los resultados anteriores.
- Si eres nuevo en el negocio no sobreestimes tus ventas. Observa las condiciones del mercado ecuatoriano y el sector en el que operas para hacer estimaciones más cercanas a la realidad.
Paso 3. Clasifica tus gastos
Los gastos son una parte fundamental del presupuesto. Es clave dividirlos en dos tipos: fijos y variables.
- Gastos fijos: Son aquellos que se mantienen constantes cada mes, como el alquiler de oficina, sueldos, servicios básicos (agua, luz, internet), entre otros.
- Gastos variables: Estos fluctúan dependiendo de la actividad de tu negocio, como compras de materiales, publicidad, comisiones de ventas, etc.
¿Cómo hacerlo?
- Haz una lista de todos los gastos fijos que debes cubrir cada mes. Esto te dará una base sólida de lo que siempre tendrás que pagar.
- Luego, analiza los gastos variables, debes de tener en cuenta tus proyecciones de ventas y el nivel de actividad de tu negocio para estimar cuánto variarán esos gastos.
Paso 4. Establece un fondo de contingencia
En tu presupuesto también es importante prever un fondo de contingencia. Este es dinero reservado para cubrir imprevistos, como emergencias, gastos inesperados o caídas en las ventas.
Un fondo bien gestionado te dará tranquilidad para enfrentar situaciones adversas sin poner en riesgo la operación de tu negocio.
Paso 5. Asigna los recursos de manera estratégica
Una vez que tienes los ingresos y los gastos proyectados y bien identificados es hora de distribuir tu presupuesto en las áreas clave de tu negocio. Esto te ayudará a asegurarte de que estás invirtiendo de manera estratégica en lo que realmente va a hacer crecer tu empresa.
Por ejemplo:
- Divide tu presupuesto en categorías esenciales, como:
- Operaciones: Costos de producción, inventarios, distribución.
- Marketing y ventas: Publicidad, promociones, investigación de mercado.
- Personal: Sueldos, capacitación, beneficios.
- Tecnología e innovación: Inversión en herramientas o equipos nuevos.
Asegúrate de que tu presupuesto esté equilibrado y enfocado en las áreas que son críticas para tu crecimiento.
Paso 6. Revisa y ajusta tu presupuesto regularmente
Recuerda, tu presupuesto no es un documento que no se puede mover. Debe ser revisado y ajustado de manera regular para asegurarte de que sigue alineado con la realidad de tu negocio.
¿Cómo puedes hacerlo?
- Haz un seguimiento mensual de tus ingresos y gastos.
- Compara lo que realmente has gastado y ganado con lo que habías proyectado.
- Si notas que no estás alcanzando tus expectativas de ingresos, identifica áreas donde puedas reducir gastos o mejorar la eficiencia.